HITOS TEOCRÁTICOS RAPA NUI
Aquí presentamos algunos de los principales hitos de la obra teocrática en Rapa Nui: desde la llegada de los primeros Testigos en los años 70 y los primeros pasos (Conmemoración y bautismo), pasando por el envío de precursores especiales en 1991, la construcción del primer Salón del Reino en 1995 y la formación de la primera congregación en 1996.
Continúa con la primera asamblea de circuito realizada en la isla (2001), el inicio de traducciones al re’o rapa nui (2010) y la dedicación del nuevo Salón del Reino junto a la Oficina Remota de Traducción (2018).
Culmina con la formación, en enero de 2023, de la segunda congregación de la isla, íntegramente de lengua rapa nui.
Fines de los ’70 a 1985
Primeros testigos a la isla
Primera Conmemoración celebrada en Rapa Nui
Primer bautismo en la isla
“Serán mis testigos (…) hasta la parte más lejana de la tierra”, afirma Hechos 1:8. Estas palabras proféticas tienen especial significado en Rapa Nui, que está considerada como uno de los lugares habitados más aislados del planeta, en medio del Océano Pacífico y en el vértice occidental del llamado triángulo polinésico.
En cumplimiento de esa declaración, el extremo aislamiento no ha impedido que desde fines de los años ’70 la verdad comenzara a llegar a esta remota tierra, con algunos testigos que por razones laborales se trasladaron a la isla desde el continente. Ellos dieron testimonio, celebraron por primera vez la Conmemoración y hasta lograron el primer bautismo de un residente en la isla. Este hermano sigue sirviendo fielmente.
Sin embargo, se necesitaba impulsar la obra a mayor grado tanto para buscar a los merecedores como para atender de manera permanente las necesidades espirituales de las personas que progresaban.
Enero de 1991
Llegada de la primera pareja de precursores especiales
Al igual que en otros territorios, para que las semillas de la verdad se esparzan ampliamente y se arraiguen con fuerza, se necesita más que el esfuerzo de hermanos aislados. Por eso, la sucursal de Chile envió a la primera pareja de precursores especiales, los hermanos Darío y Winny Fernández, con el fin de predicar en forma organizada el territorio y celebrar las reuniones en forma periódica. Pero fue más que eso: ellos pusieron las bases para la futura primera congregación de la isla.
Al llegar, se dieron cuenta de la influencia que poseían en aquellos años los líderes religiosos en la comunidad, pero a la misma vez descubrieron la fuerte religiosidad de la gente, quienes ‘buscaban a Dios, aunque fuera a tientas’, desde tiempos ancestrales. Y gracias al trabajo de estos precursores especiales ahora tenían la oportunidad de encontrarlo (Hechos 17:27).
1995
Dedicación del primer Salón del Reino
Antiguamente, los ahu, o plataformas ceremoniales de piedra levantadas sobre todo cerca de la costa de la isla, eran no solo espacios rituales sino el foco de las actividades comunitarias. Allí se realizaban actividades religiosas, pero también distribución de alimentos y reuniones sociales; por eso hasta la actualidad se continúan restaurando e investigando los ahu, considerados fundamentales en la historia de la sociedad ancestral de la isla.
Desde 1995, Rapa Nui contaría por primera vez con algo muy superior a esas impresionentes plataformas megalíticas: un centro visible de la adoración verdadera en esta remota tierra, con la construcción del primer Salón del Reino. Este salón, modesto pero digno, fue construido usando una estructura prefabricada de madera traída por barco desde el continente y levantado en un terreno facilitado por la primera hermana bautizada de la etnia isleña.
Eso no era nada sencillo, ya que las tierras de la comunidad están protegidas por diversas leyes y costumbres y era difícil pensar en conseguir un terreno para una construcción de este tipo. Pero gracias a Jehová, por primera vez los hermanos podían alegrarse y decir “Vamos a la casa de Jehová”, el Salón del Reino donde por más de 20 años se reunieron nuestros hermanos (Salmo 122:1).
1996
Formación de la primera congregación, llamada “Isla de Pascua”
Con la predicación sistemática por todo el pueblo, el programa regular de adoración, la distribución amplia de publicaciones y el primer Salón del Reino, en pocos años el grupito de hermanos y estudiantes comenzó a ‘plantarse’ y ‘florecer’ como adoradores del Dios Verdadero, llegando a formar la Congregación Isla de Pascua, la primera de este territorio, con alrededor de 30 publicadores (Salmo 92:13).
Noviembre de 2001
Realización de la primera asamblea de circuito
La imagen clásica que se tenía de la historia del pueblo rapa nui hasta hace unas décadas atrás era la de una civilización que se había mantenido por siglos sin ningún contacto con otras poblaciones. Esto parecía lógico en vista del aislamiento extremo de la isla y porque los vestigios arqueológicos y el subsuelo de la isla aun tenían muchos secretos a la espera de ser descubiertos.
Así, tras años de investigación científica multidisciplinaria, el paradigma actual considera que los habitantes antiguos mantuvieron algún contacto con otras islas polinésicas, y no solo eso, sino que desde Rapa Nui incluso alcanzaron las costas de Sudamérica. Por eso hay quienes aseguran que para estos avezados navegantes el inmenso océano era como una carretera desafiante más que un obstáculo invencible.
Nuestros hermanos de la isla también parecía que por años iban a seguir desconectados del contacto directo con sus hermanos de otros lugares. Por los casi 4 mil kilómetros que separan Isla de Pascua del continente, la congregación difícilmente podía asistir a las asambleas de circuito y de distrito, y en cambio recibían los programas en cintas de video que eran reproducidas en el salón.
Pero la sucursal de Chile analizó la posibilidad de tener una asamblea presencial en la isla y decidió celebrar la primera asamblea de circuito el año 2001, con el apoyo de varios hermanos de Chile. Para quienes llevaban años sirviendo en forma aislada en este tierra, la hermandad mundial se les comenzó a hacer una realidad cada vez más tangible (1 Pedro 2:17).
Con mayor frecuencia se comenzaron a realizar asambleas de este tipo y en el presente nuestros hermanos tienen asambleas de circuito en la isla todos los años, como también todas las visitas del superintendente de circuito. Incluso, gran parte de la congregación se planifica con tiempo para asistir a las asambleas regionales en el continente. ¡Ahora, cuando hablan de la ‘hermandad mundial’, saben exactamente a qué se refieren!
2010
Inicio de la traducción a la lengua rapa nui e impresión de la primera publicación en la lengua
Las mundialmente conocidas “tablillas parlantes” de Isla de Pascua todavía encienden la imaginación de investigadores y apasionados de la historia antigua. Estos objetos por lo general consisten en trozos de madera en forma parecida a una tabla de pequeño tamaño grabados con signos que ciertos estudiosos consideran un tipo de escritura jeroglífica. Las menos de 30 tabillas conocidas están distribuidas en museos de varios continentes. Los conocedores de esta escritura o código mnemotécnico fueron raptados durante el siglo XIX para hacerlos trabajar en las islas guaneras y en plantaciones del Perú. En la misma época los habitantes de la isla sufrieron el embate de enfermedades como la viruela, que diezmaron a la población hasta llevarla casi a la extinción hacia fines de la década de 1870. Estas sucesión de catástrofes sellaron quizás para siempre la posibilidad de descifrar las tablillas. Eso en cuanto a la escritura, pero ¿y la lengua oral?
La lengua nativa de la comunidad, la lengua rapa nui (“Re’o Rapa Nui” o “Vānaŋa Rapa Nui”), también ha estado muy amenazada. Durante el siglo XX hubo un periodo en el cual estaba prohibida; incluso algunas familias isleñas razonaban que era mejor para los niños no aprender su lengua debido a que les podía dificultar sus posibilidades de educarse en el continente.
Sin embargo, desde los años ’80, la enseñanza, uso y difusión de la lengua rapa nui ha ido tomando fuerza gradualmente y para gran parte de la etnia es la lengua en la que comprenden mejor las verdades bíblicas básicas. Además, esas verdades expresadas en su lengua materna se perciben como más cercanas, más propias. ¿Sería posible impulsar la predicación y la enseñanza en esta lengua por medio de publicaciones impresas, tal como hace en tantos otros lugares la organización terrestre de Jehová?
El desafío no era menor: se trata de una lengua polinésica oral y muy dinámica, para la cual había apenas unos pocos glosarios, gramáticas y diccionarios o muy antiguos o muy rudimentarios. Qué decir de la estandarización en la escritura, donde se ven mucha variabilidad. El vocabulario y las formas de expresar las ideas también son muy diferentes al inglés o al español.
Aun así, la voluntad de nuestro Gran Instructor es que personas “de todas las naciones” y de todas las “lenguas” acudan a su montaña a educarse (Isaías 2:2; Apocalipsis 7:9). Por lo tanto, el año 2010, con el apoyo y la capacitación de la sucursal, un pequeño grupito de hermanos locales comienza la traducción de publicaciones bíblicas en lengua rapa nui, que son impresas y distribuidas causando un gran impacto en la comunidad. De esa forma, la gente empieza a familiarizarse con una nueva palabra en su lengua materna, la palabra más hermosa de esta lengua ancestral: “Iehoha”, Jehová.
Diciembre de 2014
Realización de la primera Asamblea de Distrito
“Sigamos buscando primero el Reino de Dios” fue el título de esta asamblea, realizada los días 19, 20 y 21 de diciembre. Nuevamente se contó con el presencia de decenas de hermanos que acudieron voluntariamente desde el continente a apoyar a los hermanos locales. A raíz de esta asamblea se produjo el primer programa de radio para apoyar la obra ministerial en lengua rapa nui, con una serie de episodios que a través de música instrumental y audios breves lograron familiarizar a la comunidad con algunos temas básicos de la Biblia y además sacar buen provecho de una de las primeras piezas de literatura impresas en el idioma local, “Ka ŋaruhoa koe ki te ꞌAtua” (“Podemos ser amigos de Dios”).
2018
Dedicación del nuevo Salón del Reino y de la Oficina Remota de Traducción
Por más de dos décadas el Salón del Reino estuvo ubicado en un lugar muy discreto del pueblo de Hanga Roa, único poblado de Isla de Pascua. A través del tiempo, este querido edificio recibió muchos arreglos, hasta que se hizo urgente la necesidad de una nueva construcción. Debido al aislamiento de Rapa Nui y su pequeña población, los fletes aéreos y marítimos y los materiales de construcción siempre han sido muy elevados. ¿Habría que recurrir nuevamente a una solución prefabricada liviana parecida a la anterior? ¿Se levantaría en el mismo lugar fuera de la vista de la comunidad? Jehová pronto revelaría las respuestas.
Los hermanos locales se dieron cuenta de que las palabras del Salmo 48:12, 13 parecían bien reflejadas en la forma como se enfrentó este nuevo desafío: “Marchen alrededor de Sion, denle la vuelta completa; cuenten sus torres. Fíjense bien en sus murallas defensivas. Examinen sus torres fortificadas para que les hablen de esto a las generaciones futuras.” ¡Qué vista más inspiradora! Efectivamente, la organización de Jehová decidió levantar un nuevo Salón del Reino con altos estándares de construcción, amplio, bien equipado, incluso con adaptaciones al clima subtropical de Rapa Nui. Y además, localizado a la vista de toda la comunidad y de los cerca de 100 mil turistas que visitan Pascua anualmente.
Pero eso no fue todo: después de varios años trabajando en la “sala B” del antiguo Salón del Reino, el grupo de traductores recibió un espacio digno y funcional en una nueva oficina de traducción, parte del mismo proyecto. Decenas de voluntarios de varios lugares del continente e incluso de otros países, acudieron a apoyar la obra y en pocos meses culminaron una edificación que fue muy comentada dentro de la comunidad y por funcionarios públicos debido a su belleza, excelentes terminaciones y limpieza durante las faenas. Dos arquitectos, uno de la municipalidad y otro particular, expresaron su satisfacción por el resultado y destacaron la acuciosidad técnica aplicada en las obras. ¡Qué gran testimonio fue el trabajo de los voluntarios del nombre Jehová en este territorio! Este hito hizo resonar las palabras de Isaías 42:12 cuando dice “Que le den gloria a Jehová y que en las islas anuncien su alabanza.”
enero 2023
Formación de la segunda congregación de la isla, de lengua rapa nui
Desde la colonización polinésica de la isla, hace quizás unos 10 siglos, el pueblo rapa nui se caracterizó por la búsqueda constante de la divinidad. En alguna época, se piensa que deidades típicas en otras islas del Pacífico jugaron algún papel, como Hiro y Tangaroa. Gran parte de la historia local está definida por alguna clase de culto a los antepasados. Y se piensa que en los últimos siglos de la antigua cultura, el rito del Tangata-Manu (Hombre-Pájaro) habría sido central en la sociedad isleña. Por otro lado, dos creencias fundamentales han pervivido hasta este día: el “mana”, o poder espiritual atribuido a ciertas personas y objetos; y el “tapu”, la noción de lo que es prohibido en sentido religioso. Estas ideas han convivido con la catequización de la población, iniciada en la segunda mitad del siglo XIX. La fusión de ideas ancestrales y otras introducidas por la cristiandad se perciben todavía en parte de la comunidad. ¿Podía este escenario poner una barrera infranqueable al avance de la verdad en esta comunidad influida histórica, social y culturalmente por esos dos flujos de creencias?
La misma historia de la isla nos enseña lecciones sobre el carácter del pueblo rapa nui. Hubo un momento en su historia que derribaron las estatuas de sus antepasados, los “moai”. No sabemos con exactitud las causas de esta furia iconoclasta, pero se la asocia al fracaso del sistema basado en el culto a los ancestros. Los moai fueron intencionalmente derribados de sus plataformas y quebrados; los ojos de coral y piedra volcánica fueron arrancados y con ellos el influjo que estas estatuas ejercían en el pueblo. Más adelante, el ritual del Tangata-Manu derivó en una mera competencia casi deportiva. Y en tiempos modernos, las personas se han ido dando cuenta de las grietas en los dogmas y prácticas de la religión católica.
Así es, las personas merecedoras de este pueblo de supervivientes, que buscan al Dios vivo y verdadero, y que “Suspiran y se lamentan por todas las cosas detestables” de las religiones falsas tienen ahora una oportunidad todavía mayor de llevar el ‘yugo fácil de llevar’ de Jesucristo. ¿Cómo? Gracias a Jehová, por la formación de una nueva congregación en este territorio: la congregación de lengua rapa nui (Ezequiel 9:4; Mateo 11:30). Más de 20 publicadores se reúnen semana a semana y se enfocan en su ministerio sobre todo en la población que prefiere su lengua nativa. Todos ellos se hacen eco de las las palabras de Isaías 42:10: “Cántenle a Jehová una canción nueva, su alabanza desde los confines de la tierra, ustedes, los que navegan por el mar y todo lo que hay en él, ustedes, islas y los que viven en ellas.”
Noviembre de 2025
Asamblea Regional “Adoración Pura”
Esta es la primera Asamblea Regional celebrada en Rapa Nui, y por eso esta asamblea sin ninguna duda representa un hito más en esta historia, y tú, que viniste a apoyarnos, eres parte de este hito.
